Después de que una caída casi acabara con su temporada, la endurera escocesa Ella Conolly tuvo un regreso triunfal a las Enduro World Series. ¿Qué se necesita, física y mentalmente, para volver a montar en bicicleta?
15 October 2022
La progresión a menudo tiene un precio. Los ciclistas de montaña conocen muy bien la rutina: progreso, lesión, recuperación. Todos nos movemos en el filo de la navaja entre el control y el caos, donde un paso en falso puede llevar al desastre. Las catástrofes se producen en distintos grados: a veces escapamos con poco más que un subidón de adrenalina y la sensación de que las cosas podrían haber ido mucho peor. Otras veces no tenemos tanta suerte.
La ciclista escocesa y atleta de Rapha Ella Conolly está muy familiarizada con el ciclo de recuperación de lesiones. Con una presencia constante en el podio desde que comenzó a competir en las Series Mundiales de Enduro, la corredora de ojos brillantes de las Highlands fue una dominante corredora junior con dos temporadas ganadoras casi impecables en algunos de los senderos más formidables del mundo.
Durante su primer año en la élite, Ella demostró una gran valentía a la hora de ascender en la clasificación tras un comienzo difícil. Pero esa temporada tuvo un final traumático cuando sufrió un espeluznante accidente en un jardín de rocas y tuvo que ser trasladada en helicóptero desde el circuito. El enorme hematoma en la cadera y la gran cantidad de sangre y hematomas hacían pensar que podía ser mortal, pero las radiografías sólo mostraban una fractura de la cabeza del radio; no era el mejor resultado, pero podría haber sido peor. Esta fue su primera rotura de codo de su carrera, pero no iba a ser la última.
Después de dos años irregulares marcados por la nebulosa incertidumbre de competir durante una pandemia mundial y una temporada deslucida en la que le costó encontrar su fluidez, Ella se dedicó a entrenar y se lanzó a 2022 con toda su energía y convencimiento. En Innerleithen, ganó su primera carrera de élite de las EWS en Escocia, ante la entusiasta respuesta de sus compatriotas y de la comunidad. Este iba a ser su año, sin duda.
Pero en menos de un mes después de su gran victoria en Innerleithen, Conolly volvió a romperse un codo -esta vez el otro- durante los entrenamientos en Val di Fassa. Como dice Ella, "estaba destrozada. Por fin sentí que tenía la bici bien puesta a punto, que había entrenado durante el invierno, y que por fin rodaba como sabía que podía hacerlo. En ese momento, lo único que pasaba por mi cabeza era el resto de la temporada: si podría volver a correr o no".
Tras haber sufrido la misma lesión tres años antes, Ella se esforzó por recuperarse. Gracias a los ejercicios diarios y a los comentarios de su fisioterapeuta, el brazo de Ella ya soportaba peso al cabo de cuatro semanas. Al cabo de seis semanas, pudo volver a montar en bici: un regreso extraordinario, que ni siquiera Ella esperaba. Además de curarse físicamente, tuvo que recuperarse mentalmente tras un golpe así de traumático.
"Seguí los consejos del fisioterapeuta y hablé bastante con un psicólogo, así que había herramientas físicas y mentales que podía utilizar para volver a subirme a la bicicleta. La visualización positiva fue realmente útil. Veía un vídeo de GoPro de algo que había montado antes, y visualizaba ese camino y mi codo funcionando bien, como si todo fuera normal. Me imagino fluyendo por un sendero con una sonrisa en la cara".
La radiante presencia de Ella adornó el podio en todas las rondas desde Whistler, lo que supuso una increíble temporada de regreso para la joven de las Highlands escocesas. Entonces, durante la etapa profesional de Loudenvielle, su última carrera de la temporada 2022 de las EWS, Ella tuvo una dura caída y decidió tomar la difícil decisión de retirarse, temiendo una conmoción cerebral. Incluso con un par de rondas perdidas, Ella terminó quinta en la general, un resultado digno de celebración.
Es un recordatorio de que la victoria sólo se enriquece con la adversidad. Todos tenemos nuestras cicatrices, ya sean dedos meñiques torcidos o clavículas sobresalientes con arcos interrumpidos. Son las lecciones que se aprenden por las malas, porque al final sacamos exactamente lo que ponemos, y tenemos la sensación de que Ella Conolly seguirá brillando en 2023. Te estaremos animando, Ella.
